Estimular niños bilingües
Si en tu casa tu marido y tú hablan idiomas distintos, no existen razones por las que vuestro hijo no pueda convertirse perfectamente en un niño bilingüe. Un segundo idioma se aprende de igual forma que se aprende el primero. Al principio, el bebé, aún dentro de la barriga de su mamá, empezará a oír su lenguaje y a familiarizarse con ello. Si el padre le habla un segundo idioma, el bebé también se acostumbrará a escucharlo. Los bebés primero oyen para que después puedan expresar lo asimilado, y así aprender a utilizarlo para adquirir una comunicación fluida. Lo fundamental en todo el proceso es enseñarles con paciencia y con mucho cariño para que los niños crezcan con una reacción positiva hacia los idiomas y que disfruten de ambos.
Si existe el interés de la familia a que el niño sea bilingüe, la casa no es el único lugar para aprender un segundo idioma. Hoy en día, existen muchas alternativas y espacios por las que el niño pueda adquirir la experiencia de hablar otro idioma. Existen lugares donde el niño puede perfeccionar lo aprendido en casa. En la escuela, en la calle, en la biblioteca, o en otros lugares. Escuchar, hablar, leer y escribir un segundo idioma es parte del proceso para ser bilingüe.
Cómo ayudar al hijo a ser un niño bilingüe
Ayudar a tu hijo a que escuche o hable un segundo idioma se puede empezar y practicar en casa, a través de las conversaciones diarias, o a través de películas, o de la música. Sin embargo, existen caminos para ayudarlo en el proceso de leer y escribir:
1- Los padres pueden conseguirles materiales en el segundo idioma, como libros, revistas, y juegos didácticos;
2- Los padres pueden escuchar a sus hijos leer en el segundo idioma, sin importar que ellos no entiendan que esta leyendo el niño. El proceso en si mismo les da la oportunidad de comprometerse en la práctica de la lectura que promueve y da el soporte necesario para adquirir el segundo idioma.
Aparte de todo lo que pueda hacer los padres para que el niño practique un segundo idioma, es necesario concienciarle del privilegio y de las ventajas que tiene el niño al dominar dos idiomas.
3- La tercera propuesta es matricular al niño en escuelas y colegios bilingües, lo que le dará más seguridad en cuanto a la expresión del idioma. En las escuelas bilingües el niño compartirá sus conocimientos con otros niños y se sentirá más arropado, mejorando aún más su práctica en el idioma.
Para ser bilingüe
Existen diferentes caminos para que un niño sea bilingüe. Investigaciones muestran que es preferible desarrollar bilingüismo en niños pequeños porque es una forma natural para aprender dos idiomas al mismo tiempo. Aprender un segundo idioma incluye a los padres, factores económicos, la comunidad, experiencias, ambiente en el colegio y la cultura que pueden suministrar las herramientas necesarias para llegar al bilingüismo con éxito.
Fuente consultada: Guía de Bilingüismo para padres y profesores, de Colin Baker. Colin Baker es autor de varios libros sobre bilingüismo y educación bilingüe. Él es profesor de Educación de la Universidad de Gales.
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